Terra Mystica aterrizó en la mesa como un meteorito. La nube de polvo que levantó difuminó los demás juegos durante meses. A una partida de 2 horas le seguía otra en vez del típico filler para acabar la noche. "Los magos del caos son demasiado potentes… pásame tus Swarmlings y verás lo que es bueno…" era lo que se oía cuando acababa una partida, y es que hay muchos juegos buenos pero no todos son capaces de generar este entusiasmo.
Entonces, ¿Qué tiene Terra Mystica que lo hace tan atractivo? Cada turno es un mar de opciones y nos permite escoger el camino de nuestra tribu: apostaremos por los templos para conseguir favores o por las casas de comercio para conseguir una buena fuente de ingresos. Nos apresuraremos a construir la fortaleza o nos expandiremos para evitar que nos quiten la localización clave en el mapa.
El único azar que hay en el juego es la preparación inicial que le da mucha variabilidad, pero una vez dispuestas las losetas ya puedes trazar tu estrategia. Analiza qué raza te conviene más, estudia tus rivales y sus terrenos natales donde van a morar y escoge cuidadosemente tus emplazamientos iniciales.
La interacción no es brutal, pero la competencia por el espacio en el mapa, por los cultos que adoramos y por el progreso de nuestros asentamientos es muy alta y te mantiene en tensión. Las habilidades especiales van muy buscadas y pasar en el momento adecuado nos permitirá estar en una posición privilegiada para aprovecharlo.
Aprovechar cada turno es muy importante, pero no dudes en hacer un turno más corto para preparar un buen turno desde una mejor perspectiva. Terra Mystica es uno de esos juegos en que aunque tengas un turno malo no estás ni mucho menos fuera de juego.
Los componentes son excelentes y el juego viene con 14 razas con poderes y costes de las estructuras diferentes, que combinados con las losetas de ronda y las habilidades que escogemos cada turno hacen que no haya dos partidas que se parezcan. Un juego que brilla al jugarlo con el máximo número de jugadores y que no decepcionará a los más jugones. Una buena planificación y gestión de nuestros recursos serán la clave para llevarnos a la victoria. Ojalá cada año pudiese abrir un juego que me causara las mismas sensaciones que Terra Mystica consiguió despertar en mí.
Uno de los que tengo pendiente de trincar. Tarde o temprano acabará en mi estantería. Ya esperaremos a la edición de Homoludicus, a ver si está a la altura. Porque no es un juego barato...
ResponderEliminarEs un señor juegazo. A dos jugadores pero pierde parte de su gracia ya que el mapa es muy grande y hay poca interacción. A 3 o más juegazo. A ver si Homoludicus lo saca a buen precio.
EliminarDesde que lo comprarmos en nuestro grupo de juego, es el juego por excelencia cuando nos juntamos 5. Y eso a pesar del claro desequilibrio que vemos por ahora entre las razas y de que las elegimos al azar!
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